La verdad de Europa Prima

Desde mi rincón, estrechito en metros, pero amplio en perspectivas, paro mi tiempo y respiro... pienso... o me identifico...¿Europa raptada? No, por supuesto que no. Europa quería viajar, ver mundo y reinar soberana y libre, y era el lomo del toro tan recio y seguro, y afianzada a sus cuernos no había nada más que temer, al contrario, la sedujo el toro y ella se dejó.


    Y quien esté libre que tire la primera piedra, no vale decir luego miedo, o no fui yo.
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He de decir, a favor de todo el ganado bovino, que desde niña me atrajo tanto este mito, que por inercia o profecía, de raptos de este tipo entiendo un rato, y son mi orgullo, errados o acertados, de ser mis mejores maestros, aliados de andaduras las mías, las que os traigo en verso o prosa, o en silencios recatados...o adornadas en fantásticos posibles o en indemostrables serendipias... pero siempre sincera, por más que la sinceridad sea hoy extravagancia y la extravagancia anormalidad, a ella me ato por siempre pues prefiero, de anormal, reinar en mi Creta que vivir vasalleando las mediocridades impuestas.