lunes, 22 de agosto de 2011

Entre el espejo y la muralla.



Acostumbrada a mirar el azul del cielo
como si fuera pertenencia antigua
y por ello de menos mérito
como suele ocurrir que queda
devaluado lo que seguro tenemos
afanes de ser dueños de lo ajeno
siempre poniendo miradas fuera
en lugar de hacerlo dentro…
Así fue que una mañana
interrogando por mi piel al espejo
por si dejaba el tiempo de dormir sobre ella
o era clemente el infiel reflejo
creando la ilusión perfecta
de que todo seguía como estaba
tras de mí vi como se cerraba
aquella mi ventana al cielo…
Esperé muchas horas sentada
tarareando sonatinas con celo
que se descorriera aquella muralla
asesina de mi sol y de mi día
porque debía ser sólo un mal sueño
pero no lo hacía…
pasaron así semanas
ladrillo a ladrillo los conté todos
con las manos, con los ojos
escenario grotesco de barro envejecido
sin saber del arquitecto ni el plano
que dejó ciegas mis horas enteras
a la luz de mi cielo tan querido
sí, diría... digo, amado,
sin él
llegaron la conciencia y el amor atados
a contarme de mis desprecios
mientras al espejo me miraba
sin darle ocasión de rozar mi cuerpo
a la brisa añil que al amanecer entraba
ni cantar ni bailar a los trinos
que en el alfeizar enamorado me dejaba…
Me amaba el cielo y yo lo despreciaba
porque bajo él situé mi cama
y de tanto ver dejé de verlo…
porque siempre estaba allí cuando miraba
y siempre importaba más el tiempo
inclemente pulsión de irle a favor
o tenerlo como mi propia causa
para no tenerlo en contra
pervirtiendo cada uno de mis sueños
quién haría por cuidar lo eterno
a no ser que supiera
que podría perderlo
una tarde o una mañana
porque un muro se levanta
entre tú y tu cielo
sin saber por qué clase de magia
o qué suerte desgraciada…
Meses después, roto el espejo
con las uñas de las cutículas arrancadas
quebrados los dientes y la esperanza
con el cerebro hirviendo y el corazón en hielo
con esta sangre que derramo sobre el suelo
escribo esta plegaria
por si fuera obra de dios esa muralla
o de algún que otro ser supremo
ahora que sin duda sé que muero
ahora que sé que nada arreglaré con ello
cuando ya la culpa se fue por aburrimiento
como se fueron las ratas
que ya no quisieron acompañarme
por tantísimo que apesto
quisiera por un segundo
volver a ver ese mi cielo
y decirle lo que olvidé por dar por hecho
un segundo
ruego...
para decirle te quiero…
el resto de la eternidad para penar
no haberlo hecho hasta perderlo…

Carmen Soriano
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12 comentarios:

  1. Es fácil perder de vista aquello que tenemos tan cerca que no prestamos atención. Con frecuencia es preciso perderlo para apreciarlo. Pero de igual manera si cejamos de intentar abrir un hueco en esa pared que nos han puesto entre nuestro cielo y nosotros, es posible que muramos en una ceguera casi voluntaria, porque no la hay mayor que la de rendirse cuando todavía sabemos que fuera hay cielo y dentro nos quedan fuerzas para seguir intentándolo.

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  2. De cierto tu comentario entero Mabel, abrazos saltamurallas, gracias.

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  3. Majestuoso!!De una mirada esculcadora al poniente,
    fluye semejante divinidad de vocablos. Asi son los genios. Besos

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  4. Gracias Pocho, fue tu ventana la culpable de todo, un abrazo derribamuros. Besos.

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  5. Tal vez este sea el mas trajinado y viejo de los adagios pero siento viene a lugar... "nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde"... es casi una ley universal nuestro empeño tozudo de buscar aquello que no nos pertenece mientras tenemos con nosotros hasta nuestra propia piel y le damos tan poca importancia que hasta dejamos de alimentarla con el amor mismo.....! bella reflexión, que delicia este paseo por el mar de tus letras...! abrazos Carmen querida!!

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  6. Pocho Peñarredonda22 de agosto de 2011, 14:12

    Me amaba el cielo y yo lo despreciaba
    porque bajo él situé mi cama
    y de tanto ver dejé de verlo..
    ME HA GUSTADO TANTO QUE VOLVÍ A VISITARTE Y EXTASIARME CON ÉL. GRACIAS POR COMPARTIR

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  7. Hay quien diga que todos los grandes amores nunca son isentos de sufrimiento..... y yo asi lo acredito! Y por veces pienso lo que és mejor"si no sufrir" o conocier lo sufrimiento porque se ha conocido un AMOR distinto, ( repara como escribo la palabra)....No és fácil sufrir, no és practico, no ~es deseable, uno no lo quiere.... pero poder decir muy de mansiño, aun ninguén te lo oyga...
    "sabes? te estoy guardando adormecido en mi pecho" o
    "estoy como un pajarito volando una vez más, por sobre stas tierras onde me muerro, buscando algo que me hable de ti" o
    "no rasgues lo lino de las sabanas onde dejaste olvidado tu perfume en las nuestras madrugadas de ayer".....
    Carmen,el destaque de vivir uno grande AMOR, que vivrá más alla de la tierra... és, cada vez más, privileyo de muy pocos.... Quien lo pueda experimentar leva consigo todo lo "paquete" pero dejará inscrito en lo "livro de la Vida" que ha vivido un grande amor )))))))) Besos, milles, mi Amiga Linda!!!

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  8. Gracias Leonel y si fue grato tu paseo por mi continente, agradada el alma te pido que repitas, siempre, cuando gustes, es un honor tenerte recorriendo mis paraje, besos poeta sensible.

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  9. Ciertamente María que nada duele más que lo que no se ha hecho.. mil besos mi lusa, a cada día, más cariño...

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  10. Para que no me suceda eso, Carmen -yo no sabría escribir un poema tan fantástico- mejor te digo que te amo de una buena vez y ya... (el poema, grandioso, como lo es todo cuando proviene de una deidad -suspiro de envidia-)

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  11. Hay que vivir cada día como si fuera el último, seguir mirando las cosas como lo hace un niño que las descubre por primera vez... no debemos acostumbrarnos a poseer las cosas porque es las costumbre el primer ladrillo que cree ese muro que nos tape lo bonita que es la vida.

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  12. Mi amada Mara que sabes del color de mis días como yo de la luz que emite tu alma, te amo, gracias.

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