No cabe la fe en el razonamiento
que te hace mi dueño en cada verso
ni cabe llamar don o gracia
a este afortunado momento…
Ácrata corazón sin gobierno
que se conforma con ser
tan solo el bufón de tu reino
o el falaz conteo en tu democracia
la voz callada de tu silencio…
Ser algo de ti siendo tú todo
mi patria
mi senado y parlamento
mi escuadra y cartabón
mi martillo y mi hoz
Ser algo de ti
el qué no importa…
tu ágora o tu calabozo
una ilota o la diosa de tu templo
ser la llave de tu ciudad perdida
o la consorte de tu imperio
tu última colonia conquistada
o del cajón de tus impuestos la bisagra
ser tu edén o ser tu infierno
pero ser de ti
si ya te he dicho que eres tú mi dueño
quiero ser tu último
minuto
o de tu nueva historia el primero…
Carmen Soriano López
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El valor de lo que se cuenta,
ResponderEliminarlo que al final queda entre nuestras manos,
es el sentir lo auténtico de ser lo que somos;
y la fuerza como entregamos de nuestras entrañas... todo.
Siempre disfrutando, el leerte.
El segundo de tus regalos hoy que encuentro, ambos aprecio como a ti ya lo sabes... ayer ser auténtica me dejaba sola, hoy es lo que me sujeta, lo que más valoro, y tú como siempre el águila que desde arriba otea mis letras, por eso siempre las ves completas, un abrazo Marco.
EliminarGuardada glosa de prístinos milagros, contados en versos como líneas de las manos, plantadas cual tesoro puro que tras solo verlo, emigrara de las manos, un gas de color inobjetablemente libre y pleno, que nos recuerda lo cruel y lo imperfecto que es la suerte de todo lo llamado, humano, descarnadamente humano...Que bello, este fulgor en tus palabras, coronadas por la emoción que pugna en salirse de tus manos, talladora de mieles, como eres, una alondra que vende amaneceres...Muy grato, abrazos Carmen...
ResponderEliminarPensaba en tus manos...Todo el tiempo...Besos....
ResponderEliminarLa mano derecha, con la que escribo, es tuya, está tu nombre en la linea más larga que la cruza. Yo a veces uso de las tuyas, para alimentar a mis hijos, que siguen esperando en algún limbo atemporal y sin destino. Pero sin duda, prefiero cuando las juntamos para hacer nuevos moldes o romper los antiguos, gracias amigo mío por permitirlo. Abrazos Jose...
EliminarUna diosa no puede ser de nadie, divina Carmen. A nadie perteneces, por eso somos iguales... por eso valoro tanto tu voz, tu corazón... por eso agradezco tanto tu presencia en mi vida. Te adoro, como sólo se adora la verdad. Espero que mi anonimato no sea un obstáculo para que juntos gritemos nuestra libertad, para que tu libertad y la mía sean complemento.
ResponderEliminary elegir libremente acompañarse, libremente amarse... en un mundo de mentiras tu adoración me devuelve la fe, gracias Cris, eres más de lo que merezco pero no menos de todo lo que exijo para mí. Un besazos!
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