Puestos en caóticas filas
con el pensamiento igualmente desordenado
manos temblorosas de bondades enrarecidas
y la ropa deshecha por testigo
de su olvido y su vacío,
esperan desde ese lugar
donde saben que nada llegará
que ya no queda nada por venir
y donde sólo persiste el instinto
ese cruel enemigo indolente
que daña sus intestinos…
Cada vez que paso por delante
desde sus cristalinos endurecidos
me miran con alambres
ponen en mi boca óxido corrosivo
y ese sutil odio que entiendo
hincha mi lengua hasta el extremo
muda entonces lloro por dentro
porque no puedo decirles
que yo soy uno de ellos…
que conozco ese solitario infierno
ese destierro desde el que me miran
cuando paso con mi ropa limpia
mi bolso y mis zapatos nuevos
por delante de sus ruinas…
Esa insolidaria mudez me lo impide
porque los miro y siento frío
y siento miedo y un dolor tan fino
que a veces alguno de ellos lo huele
elige plantarse delante de mí
cuarteando la roña en su rostro
con una irónica sonrisa y me dice
tú eres yo
y yo afirmo y sonrío en silencio
toco su rostro con la mano izquierda
y sigo sin mirar atrás mi camino
hacia ese otro destierro que yo he elegido
donde soy otra suerte distinta de indigente
pero sin comedor social donde saciar mi hambre
ese permanente instinto doliente
que daña a diario también mi vientre
sin caldo ni mendrugo de pan que lo tiemple
ni lugar donde pedir asilo
entiendo entonces que de algún modo
todos somos mendigos…
todos somos adolescentes…
viviendo en desiertos más o menos agradecidos…
me miro y cuarteando la roña que no se ve
sonrío y agradezco y bendigo…
CARMEN SORIANO
Todos los derechos reservados
Les miras y te preguntas ¿tendrían una vida como la mia? ¿como han llegado ahí? ¿Están porque quieren? Hay muchos que prefieren esa miseria a la miseria de un hogar sin amor... Tu eres rica, tu nunca serás mendiga porque tienes tanto y eres tan generosa que lo regalas. Es tu riqueza la que no cotiza en bolsa, la que no da intereses... es tu alma una fuente inagotable de regalos... hoy un poema a esos mendigos... Eres muy grande poeta. Te quiero
ResponderEliminarEn la vida, lo importante es el conocimiento de nosotros mismos. Saber que no somos especiales, que en los demás estamos como ellos en nosotros, es parte de una necesidad de conocimiento, es la señal que marca la dirección hacia donde deseamos ir. Identificarse con los demás es conocernos a nosotros mismos,sus carencias son las nuestras así como sus debilidades. Yo soy tu es la mejor manera de llegar a ser. Un beso
ResponderEliminarNo soy más mi linda Mara que lo que en mi ves y siempre ves lo lindo, cómo podré entonces apartarme de tus ojos bellos para ser de peor manera... gracias mi tesoro.
ResponderEliminarGracias Mabel, no entiendo otra forma de ser que la de ser con el otro, al fin qué otra cosa es pertencer a eso que llamamos humanidad y no tiene a veces nada que ver con lo que habita en el sueño platónico, muchas gracias por llegar y hacerlo tan bella y solidaria, abrazos.
ResponderEliminarQue lugar por tu voz acrisolado, aunque en paradoja falte tu tono, mi querido bien, mi Carmen, y ese de lo creado, ponderado lugar que no escatima, es tu sacro lagar, tu iglesia sin crueldad, sin mal o bien que deban pelear para tener un fiel...Este escenario fulge, de tu presencia toma luces amplias y deja el buen sabor de la entelequia de que hablaban también antes los viejos: Que supone igualarse el adquirir la noción de sabernos y entendernos, y dejar de sufrir por aquello que es nuestro...como el hecho innegado de humanarse con quienes por dentro aun no lo saben...gracias por esto Carmen bella..
ResponderEliminarDe tus sabios consejos resultado... de extraer otras destrezas para ser a la postre lo que se es, sin remedio, sin que sea lid ni tortura, ser con otros siempre digo, en el caso contigo es siempre fortuna, otra razón para bendecir desde mi hipotéticamente lógico ateísmo... gracias luz!
ResponderEliminarHoy he salido a la calle
ResponderEliminarAbrazado a la tristeza, grita el maestro Chinato
Mas me respondo,
Cuando los ríos comenzaron a recoger el agua
Diluida de las nieves
Todos se dijeron, que bello sería un mar
Paciencia pedían los de larga mirada
Pues gota a gota, grano a grano
Se forman los océanos…
Todos podemos dar una puntada,
mientras nos sintamos chocados ante la podredumbre
ante las esquirlas que esparcimos en nuestro caminar
pobre de nosotros, el día que fríamente salgamos con desdén.
Soy Parte de tu zurrón…Bsts Mil Carmen.
Eres parte de él desde antes que lo supieras Santiago, gracias amigo mío por tanto regalo de letra, mil besos y de retornó te veré en tu casa de rojos bellos reflejos. Besos.
ResponderEliminarEl silencio puede ser un crimen, Carmen. Tú, Poeta, nunca serás culpable de silencio. Tu poema es una durísima inmersión en la parte más abismal de nuestras sombras... esas tinieblas en que pretendemos olvidar que antes que poetas, somos seres humanos, y -según lo apuntas tan claramente- no puede ser poeta quien no ama ser humano. Me fascinó, Carmen, me hubiera gustado decirlo yo, así de claro, así de bien.
ResponderEliminarDe lo poco que te sé Cristián, te aseguro lo dirías aún mejor, con ese aroma tuyo que me hechizó el primer día y por el que tu rastro descubro, gracias infinitas por la atención!!!
ResponderEliminar¡Somos gritos apagados ,por eso escribimos poemas,para gritar a quien quiera oírnos que a veces nos falta la piel ,que estamos en carne viva,que necesitamos decirlo,para calmar las heridas, llagas que supuran del tormento que nos corroe por dentro.Me matas en cada palabra,me descifras ,te adentras en mi alma me despojas de todas mis miserias.
ResponderEliminarNo ves Mayte que no es más que eso que a todos nos hace humanos... quien lo niega miente, o simplemente no lo ve... en tal sentido eres bendita amiga mía, pues no hay mapa que a punto cierto lleve si no sabes bien cual es el punto de partida... que bueno saber siempre de otro ser humano verdad querida? no hay en ti miseria alguna así te la pusieras de gorro...! gracias siempre tesoro!
ResponderEliminar