miércoles, 9 de marzo de 2011

La lluvia inexistente




Duele la lluvia como siempre
dolor desde abajo irradiado
rompe proyectos, deseos…
duele la lluvia y la pregunta
hasta cuándo seguirá lloviendo
hasta cuándo doliendo…

Mientras mi paraguas le guiña un ojo a un extraño
y se ponen en huelga las botas,
se enamora de otra el chubasquero…
Me miran los charcos y se ríen
de la tonta que metió sus pies dentro
me amigo de sus muecas, chapoteo
mientras deshago en ella los huesos secos
¿para qué los quiero?

Ya en otras tormentas he llorado
suplicado, implorando sin rodillas
cese este dolor que el camino achica
ahora me río saltando sobre charcos,
no existe la lluvia, nunca lo ha hecho
es sólo este dolor inmenso que engaña y parece
que fuera de mi estuviese, realmente, lloviendo…

Ahora que sé que no llueve
suelto el paraguas y las botas
libero mi enamorado chubasquero
abrazo tiernamente mis piernas
porque ya no espero que la lluvia cese
como no lo hará este dolor que ahora miro,
y entiendo que, de alguna forma, él también me quiere…

CARMEN SORIANO
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3 comentarios:

  1. YO TE ACOMPAÑO, CON MI TROZO DE TITANIO DOLIENDO EN TU EXTRANJERO FRÍO.............................

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  2. Porque sabe o intuye el que también metal esta hecho como se encariña el dolor con uno... o viceversa, por cuanto de realidad nos hace... gracias luz que la paz otorga.

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  3. Ese dolor permanente que no acalla su eco y que grita cuando le castiga el frio y la humedad... Hay "amores" que se quedan aunque no los necesitemos... Y se queda con nosotros ese "cariño" que no añoramos y nos recuerda que algún día llovió más fuerte y que gracias al cielo hoy es una simple tormenta...

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